mejor muerto

Muchas veces cuando muere un artista su obra pasa a tener una nueva dimensión. Es como si el hecho del que el artista estuviera muerto revalorizara todo su trabajo. De manera que la obra de artistas que en vida pasaron hambre, llega a mover montones de pasta. Pero la cuestión es que es así, y además cuanto más trágica, misteriosa o peculiar es la muerte del artista, más mítica se convierte su obra.

Ejemplos:
freddy mercury, jim morrison, jeff buckley, johnny cash, bob marley, george harrison, elvis, frank sinatra, tupac shakur, buddy holly, john lennon, bon scott, marilyn monroe, jimi hendrix, drazen petrovic, stanley kubrick, andy warhol..

por suerte, la increíble aglomeración de personas en el fórum el lunes por la noche, no terminó con una avalancha y un aplastamiento de los miembros del canto del loco y demás bandas..

Parecidos razonables I

Ante la avalancha de peticiones recibidas en Hercegovina, y una vez solucionados nuestros problemas de abastecimiento de butano, que nos impedían dedicarnos a temas frívolos como este, hemos decidido crear una colección de posts sobre Parecidos Razonables.

El primero será nuestro querido Noestabien (el cual últimamente Noestá en casa, simplemente). Por eso nuestra casa parece la Pensión Lolita's, y estamos pensando en poner carteles de Hay habitaciones libres o No Vacancy, según el caso. Por favor, señores de Tándem: no exploten a nuestro amigo. Si quieren publicistas que trabajen 78 horas semanales pidan currículums en cualquier fábrica china.

Esos spots de Volkswagen no pueden ser tan complicados, por el amor de Dios! Si luego cogen a un chimpancé y lo visten de astronauta!

Bueno, aquí va el parecido de hoy. Noesta vive a mitad de caballo entre James Blunt y Shaggy. A veces le embarga ese delicado lirismo del cantante inglés (o debería decir cantautor?), y le da por componer una balada que deja temblando a las niñas, y otras veces se deja llevar por el modo de vida holgado y hippilongo del compañero de Scooby-Doo.

Te echamos de menos!!

30

Pues eso, que soy el primer treintañero de Hercegovina. El primero en dejar los "locos años 20", y en adentrarse en el misterioso mundo de los treinta-y-tantos. Os acordáis de esa serie? Treinta y tantos. Era buena, pero los protagonistas parecían memos. Siempre enfrascados en debates existenciales, movidas sentimentales, inseguridades... Qué raros me parecían esos tipos cuando los veía en la tele, con 15, 16 años. Eran de otro mundo, a mitad de camino entre jóvenes y viejunos, que ya eran los de 40. No sabía muy bien dónde enclavarlos.

Quizá sea así, que no hace falta encasillarlos en ningún sitio.

En fin, aprovecho para dar a conocer una nueva página treintañera, que comienza hoy.

cheers

cambio de dígito (crisis? what crisis?)

Todo el mundo habla de la crisis de los 40. Hay libros a manta hablando de cómo superarla, y en el fondo todos dicen lo mismo. Quizás la mejor forma de representarla es la camisa de flores hawaïanas que se compra bill murray en lost in translation, y que provoca la burla de nuestra nunca suficientemente ponderada scarlett que le pregunta si ya se ha comprado el descapotable..

Pero qué pasa con los 30? No hay crisis? Estoy convencido, porque yo cada año sufro una nueva etapa crítica.. y, ¿cómo simbolizarla? Si la de los 40 es una camisa de flores, la de los 30 podría ser algo así como comprarse un pepino de moto, echarse una novia de 18 años, abandonar los discos de los ochenta y comprarse lo último de lo último de los 40 (que ya no sé qué es), comprarse una camiseta con una foto de paris hilton, ir a una discoteca de tarde, cantar en un karaokey creerse grande, hacerse amigo de las amigas de tu hermano pequeño, jugar al duro en un bar que huele mal, montar una roller disco party o plantearse volver a las aulas.

Algunas de éstas ya las he vivido, de modo que para mis 30 deberé buscar nuevos retos para una crisis decente.

Mientras tanto hoy cumple 30 nuestro compañero jinete, y todos esperamos que lleve su crisis de la mejor manera posible y que nos sorprenda con nuevas maneras de vivirla. Felicidades amigo, you’ll never walk alone.

"We are the mods, we are the mods"

Al grito de "somos los mods, somos los mods, somos-somos-somos los mods", cientos de chavales modernos se dieron de hostias contra otros cientos de chavales rockeros en las playas de Brighton en el verano de 1964. Esto cuenta la película Quadrophenia, que hicieron más famosos a los Who, y que visionamos en casa la semana pasada.

Se han hecho muchas películas generacionales sobre bandas juveniles. Música, moda y peleas. Rockeros y modernos (años 60), sábados noche febriles, hippies, punkis (años 70), siniestros y heavies (años 80), grunges, skins (años 90). Bakalas, alternativos, raperos... ahora hay más y más mezclados.

Supongo que cada generación o cada época tiene sus bandas o modas juveniles. Por ejemplo, yo con 13 o 14 años descubrí a Iron Maiden, Scorpions y el heavy metal. Años más tarde pasé a la plaza de Tribunal y el botellón punki con Manolo Kabezabolo y Def Con Dos. Axel dice que soy un borroka -torero terrorista-, pero creo que nunca he pertenecido a una tribu urbana. He ido montando mi propia tribu a lo largo de los años, más bien. Eso sí, siempre he mirado con simpatía al colectivo de los heavies, con sus chupas de cuero, pantalones de pitillo y melenas. Me parecen simpáticos y socialmente aportan un gran equilibrio entre el extremo estúpido de los pijos y el poco aprecio por el aseo personal de los punkis.

Inspirándonos en la mítica Quadrophenia, y recogiendo lo mejor que puede aportar cada moda, estilo, tribu o lo que sea, nuestro grito de guerra de fin de semana bien podría ser "we are the mods, we are the mods, we are-we are-we are the mods", no para darnos de hostias con los rockers, sino por... hacer algo.

restaurantes cerca del curro

Ya hace unos meses que cambié de curro, pero es ahora cuando empiezo a conocer un poco los restaurantes de la zona (enrique granados, rosselló, aribau, córcega...). Voy a hacer un pequeño repaso de lo que he visto y catado por si a alguien puede interesarle. Aquí van algunos restaurantes:

-annaghin: restaurante japonés. Menú de mediodía que no llega a 8 euros e incluye 3 platos + postre. Te llenas. Muy mal los fideos con carne de cerdo frío. Bien el maki. Muy bien las pastitas calientes rellenas de melón.
-balta: bueno y bien, pero siempre lleno. Comida casera, te gastas unos 9 euros pero comes bien. La sopa de melón con jamón y el helado de café, muy bien.
-baltazar: parece más caro y mejor de lo que es. Todo bien presentado, ambiente pijo, pero el menú no llega a 8 euros y está justificado porque no mata. Luego me dijeron que hay más de éstos y la comida la hacen en la zona franca y la reparten (mal rollo).
-tai: muy bien. Tranquilito y agradable, sirven rápido, el menú está en los 8 euros y el pad thai está rico.
-felicidad: un chino barato pero que puede salir caro. Está rico y comes mucho, pero te juegas una mala tarde. Hay que llevarse el almax.
-jaime: bar de bocata. Dieta poco nutritiva, pero bocatas enormes y muy surtidos de bacon, queso, etc. No está mal de vez en cuando para algo rápido.
-trobador: enrique granados casi diagonal. No es barato, pero está bastante bueno todo. Especialmente bueno el jamón de bellota. La terracita es agradable. Es una franquicia y me pasa que me sabe a comida de franquicia, aunque sea de calidad.
-àpat: hay que andar más. Lo incluyo por proximidad geográfica (aribau), pero no he ido a comer. Estuve cenando. Es más caro que los otros pero está muy muy bien. Carta amplia y buena, servicio perfecto, bien de vinos. Quizás un poco ruidoso.

Ya iré informando sobre demás sitios que vaya descubriendo, aunque el plan tupper o irse a casa cotizan al alza para ahorrar un poco.

nuestro castillo

El día de la tormenta me di cuenta y comenté que la ubicación de nuestro piso es privilegiada. Efectivamente, estamos en un 4º que es un 5º y los balcones sirven de perfectas tribunas para ver el espectáculo.

Pero en lo que no había caído hasta hace poco es en la ubicación del edificio. Ya lo comenté el otro día, pero es curioso que para llegar a Herzegovina 1 tienes que subir santaló o muntaner cuesta arriba. La subida es fuerte. Por la forma de bcn esperarías que las calles de detrás de Herzegovina siguieran subiendo, pero esto no es San Francisco. Curiosamente la calle camp y la call prats de molló bajan hasta mitre. Esto nos deja con nuestro querido edificio clavado en una especie de montículo que hace más espectacular la visión de los fenómenos del cielo.

Es como las antiguas fortalezas y castillos, que se levantaban en las montañas más altas para tener un absoluto dominio del territorio y controlar las posibles invasiones con suficiente tiempo como para preparar la defensa.

En nuestro castillo tenemos un jinete, tenemos un loco perdido y tenemos a un malherido. Y de vecinos tenemos a los que adoptan el papel de princesas, al brujo que vino de otro país e incluso en la puerta hay un cocodrilo. Aunque este más que defender la fortaleza la debilita porque no deja pasar a los que llevan provisiones...

Elementos

Anoche retumbaron los cimientos de Hercegovina con una de esas tormentas eléctricas que descargan en el Mediterráneo en los meses de septiembre. Los relámpagos se sucedían uno tras otro y, tras ellos, sin intervalo ni tregua, truenos ensordecedores. Me imaginaba a Thor enfadado con alguna de sus walkirias por una cuestión trivial, golpeando su martillo contra un yunque celeste, desatado de furia. La sinfonía de ruido era grandiosa, demostrando el poder de la Naturaleza y la poca cosa que somos nosotros, los mortales. Y sin embargo, la única cosa que nos separaba de estar empapados de los pies a la cabeza enmedio de la tempestad era el fino cristalito de los ventanales, un techo y un tejado que alguien construyó correctamente. Una casa, en definitiva.

Ver una tormenta desde el salón de casa tiene algo de espectáculo por esa razón. Es asistir a un espectáculo natural comparable a una mascletá, pero también es un show casi televisivo porque desde nuestra casa quizá vemos a otras personas que han quedado atrapadas bajo la lluvia, o pensamos lo bien que estamos en nuestro refugio mientras ahí fuera están lloviendo cántaros, y nosotros estamos a salvo. Me gustan las tormentas de todas las formas. Si me pilla en mitad del campo porque son un espectáculo gratuito, pero también si estoy en casa porque me hacen ser consciente de que, en el fondo, estoy a salvo de algo que hay ahí fuera y que no me gusta nada.

Es como el arroparse por las noches sin motivo, sólo por el hecho de estar protegidos ante el misterioso viaje que sigue siendo para nosotros el tránsito de la noche al día. Podemos dominar la tierra, el mar y el aire, o al menos creerlo. Pero seguimos siendo pequeños frente a las cosas que nos superan. La noche, el agua, el fuego. Quizás también por eso seguimos construyendo edificios, en el fondo. Para refugiarnos de los elementos que ancestralmente nos han dominado y seguirán haciéndolo.

Donde tengas la olla no metas la... alpargata

Un amigo mío se ha enrollado con una compañera del trabajo. Bueno, hasta ahí todo bien, ¿no? Siempre es una alegría para el cuerpo. Conozco a otro tipo que se lió con una compañera suya y acabaron casándose, y a otro al que también le pasó lo mismo y al cabo de los meses dejaron de hablarse. Bueno, lo normal, somos seres humanos, y al fin y al cabo pasamos más tiempo con nuestros compañeros de trabajo que con nuestras familias. Algo tiene que salir de eso, bueno o malo.

A mi, por experiencia, mezclar ambas cosas no me convence. Quiero decir, mezclar lo personal con el trabajo. Ni llevarse el trabajo a casa, ni llevarse la casa al trabajo. Está claro que en un trabajo conoces a grandes amigos, grandes amantes, incluso grandes amores. Pero grandes enemigos también. Y más que en cualquier otro ámbito de la vida. No se trata de ser de hielo o de piedra y cumplir un trabajo de forma mecánica, imperturbable. Se puede tener una relación cordial y afable con todo el mundo sin dar muchas explicaciones de tu vida privada, pero cada vez es más difícil mantener esa privacidad. Parece como si pasar 8 o 9 horas juntos diera derecho a ser amigos, acceder a tus blogs, conocer el color de tus gayumbos o saber de qué pie cojeas. Somos muy cotillas, indiscretos. El Aquí hay tomate no es sólo un invento de la tele. Los cotilleos empiezan en el trabajo, y nos encantan.

He conocido a grandes amigos en el trabajo, personas con las que la buena relación profesional ha dado paso a una excelente relación personal, pero no es lo corriente. Suerte del que lo consiga, mejor para él. Pero que se guarde muy mucho de ser pasto de cotilleos, correveidiles y tergiversaciones sobre su vida privada, porque entonces sí que estará jodido. Algo no es noticia si no se difunde, eso está claro, y si dos personas (o más) no quieren, nadie tiene por qué saber más allá de una línea privada. Pero ya hay que recurrir a los secretos, a las maniobras, a las estrategias. Divertido, por otra parte, pero desconcertante.

En fin, lanzo la cuestión sin ánimo de indirectas ni dobles sentidos, y sí con ánimo de polemizar sanamente y calentar los posts. Además, lo fundamental de todo esto es que... nos atrae el peligro y siempre estaremos dispuestos a dejar de lado nuestros principios por una buena causa.

estrenando alcalde

Por motivos políticos desconocidos y un poco sórdidos (cómo no, es política..) en bcn nos han cambiado el alcalde. El ex alcalde clos pasa a ser ministro sustituyendo a montilla para que este se encargue exclusivamente de la sucesión de maragall.

El nuevo alcalde (no elegido democráticamente; elegido a dedillo) se llama jordi hereu (hereu en castellano sería heredero, lo que parecía un buen presagio).

Pues bien, será casualidad o no pero el 1r día del hereu ya pillé y me encontré una multa por aparcar en un sitio con una señal que lo prohibía recién inaugurada. Es más, casi estoy seguro que mientras la moto estaba aparcada vino un poli y puso la señal y luego me clavó la multa.

Joder “sr. alcalde-nuevo” tenga compasión si lee este blog y quíteme la multa. Que soy un buen ciudadano...