en escandinavia no hace calor

Normalmente soporto mejor el calor que el frío, pero tengo que decir que cuando llega el bochorno me entran unas ganas inmensas de emigrar a un país un poco más frío.

Meteorología al margen, mi admiración por los países escandinavos viene de lejos. Es cierto que hablan idiomas parecidos al de los peces; es cierto que en pleno invierno el frío es extremo y un taxista llamado markkus me dijo que a veces se le rompía la llave al meterla en el cerrojo de la puerta de casa porque se le congelaba (así es el frío allí); es cierto que es de noche durante la mayor parte del día en invierno, y todo lo contrario en verano; es cierto que todo esto les forma un carácter más bien triste y taciturno (no en vano son algunos de los países con los mayores índices de suicidio).

Pero también es verdad que son civilizaciones que como tales nos llevan ventaja (más cívicos, me refiero) y que se nos van a comer (fijaros en la forma de cabeza de dragón de escandinavia, que los tíos se comerán el mundo!).
Y sobre todo que hace más fresco ahora mismo.